Mirando avanzar los minutos

Cuando hasta el mismo tiempo numérico es fuente de entretención. Asombrarse por haber vivido 12 minutos al hilo, tres minutos astutos con las actividades programadas. Todo eso da risa y me hace regocijar, como una jarra de jugo que se pasa de brazo en brazo con dificultad, y en este intercambio parte del jugo prueba a hacer gravedad en lugares como el piso o los brazos de los involucrados. Sí, así como el jugo Zuko y sus idílicas jornadas familiares, pero con un poco de Nietzche, veo afrente mío a la vida, dadivosa con todos sus hijos.

Es también como la anulación de los roles sociales de la edad media. Una fiesta de tres días para vivir en igualdad de roles y que cada cuerpo suelte sus ataduras con brebajes coloridos y finas estampas.

Una vez Pancho Sazo (El que también es vocalista de la banda Congreso) dijo a una cámara algo así como que había un enorme potencial con esa generación de músicos. Pisaba con firmeza pero surfeando las leves olitas de las aguas de la oficialidad y los autogestionamientos desinteresados. Meses después, TVN se inspira en esta idea para crear el programa «Puro Chile». Veamos si ese alambre respeta las concavidades de esa rama natural.

Anoche soñé con mi casa de infancia, lo recuerdo antes de dormir. Ya no estoy para buscar el significado ocasional de ese sueño: me los sé todos (es un decir). Creo ahora que es interesante desvelar esa clase de significados con la propia capacidad de discernimiento y de sentir. Y para sentir, ya sabemos, hay que saber.

Imaginarse en una tierra realmente plana ¿No sería sospechoso si se piensa que la forma del mundo se parece a la manera bípeda de transportarnos? La redondez puede que sea hasta el lejano recuerdo de una asignatura de células. Célula, tienes los días contados. Un balón de rugby (astronomía práctica) y las hendiduras inferiores del mapa mundi (geografía práctica y matriarcal) son alimentos que, siendo ciertos o no, están ahí como comprensiones humanas esperando ser pulidas, cuidadas y trozadas, como buenas piedras de cuarzo caídas del cerro (no vamos a comentar por qué razón).

Los tiempos adentro de las canciones ¡tan diferentes, incomprensibles entre sí, y generosas son! Tantos humanos haciendo coincidir la destreza humana con los tiempos de corazones y ambientes claves para el desarrollo de la especie por medio de la bendición de los aires. Lo voy a seguir diciendo, aunque no he ido a corroborarlo aún: en la película «La vida es bella» (Si gusta de los clásicos, y no la ha visto, es probable que en algún momento de su vida le hagan llegar a su mirada esta proyección de película) retrataron a un trompetista que comienza a tocar particularmente mejor la guitarra cuando su amada hace entrada en la fiesta al aire libre. Eso es un detalle bello para mi.

«¡Está rico! Sí, está bueno». No, dije que estaba «rico», porque el sabor tiene sus grados de satisfacción con el estímulo recibido. Bueno puede estar en una competencia científica, en un lugar donde no se suelen hacer pecados, o en un control de calidad, pero el regocijamiento se realiza inexorablemente en la apreciación de su propio nacimiento.

Voy a buscarlos a ustedes, merodeadores ocasionales (y comprometidos) del WordPress. Amistades de amistades repetidas hasta el infinito, donde ya nada importa aferrarse a alguno de estos reflejos. Pero sepan que desde hace tiempo escribo comentarios en otras redes y orgullosamente entro a mi sesión personal. Un poco de color ante tanto anonimato gris, y de ahí, tejer los contrastes en un gris exclusivo (frío o caliente, en síntesis).

Les informo que voy a compartir por este medio algunos escritos realizados en el pasado. Para que los conozcan y comenten si desean. Textos sobre libros, películas.

Espero haber sido un buen acompañante de tu tiempo en estas lecturas, no piensen que me voy a despedir siempre así.

 

 

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